EDITORIAL
D�a del Trabajo
Los trabajadores recuerdan hoy la gesta del 1 de mayo de 1886, una jornada desarrollada en reclamo a la jornada laboral de 8 horas. El centro de una masiva huelga fue la f�brica de maquinaria agr�cola Cirus MacCormick, donde la Polic�a intervino y seis trabajadores murieron. En los d�as subsiguientes, los enfrentamientos continuaron y el n�mero de v�ctimas se increment�. Esa hist�rica jornada fue la que dio paso al D�a del Trabajo, que hoy se conmemora en la mayor�a de los pa�ses incluyendo a Panam�. En Panam� existen 962,269 personas que clasifican en la categor�a de trabajadores, pero un tercio de esa suma lo hace dentro del desfavorable sector informal, pero adem�s hay 126,705 desempleados. Para esos desempleados resulta un gran trabajo conseguir trabajo. A los j�venes no se les contrata, porque casi siempre media la exigencia de contar con experiencia. A los m�s viejos -aquellos de 35 a�os para adelante- tampoco se les quiere, porque ya cuentan con una edad muy avanzada para ingresar al sector productivo. Todo esto es contradictorio, pero as� es la situaci�n de Panam�. Las leyes laborales se reforman cada cierto tiempo con el prop�sito de atraer las inversiones extranjeras y las zonas procesadoras para la exportaci�n, que nunca llegan. Claro que las legislaciones deben adecuarse a las necesidades del presente, para enfrentar la competitividad internacional, pero la base de todo cambio debe tener como base la productividad.y la calificaci�n de la mano de obra. Ya lo ha dicho el economista brasile�o Ricardo Paes de Barros en la reciente Conferencia de Ejecutivos de Empresas (CADE), Panam� debe utilizar mejor su fuerza laboral. El pa�s, dijo acertadamente Paes de Barros, debe atraer inversiones de m�s alto nivel tecnol�gico y no cifrar esperanzas en maquiladoras basadas en fuerza de trabajo de baja calificaci�n e igual categor�a de salarios. A los trabajadores paname�os les toca mejorar su calificaci�n, lo cual debe ir acompa�ada de la educaci�n respectiva que debe suministrar el Estado. Adem�s sin claudicar en sus conquistas, los trabajadores deben tratar de mantener relaciones de mutuo respeto con los empresarios, ya que juntos suman el capital necesario para que el pa�s genere riquezas y por ende alcance un mejor desarrollo. Desde 1886 a este nuevo milenio, las cosas han cambiado mucho. Se han superado los abusos de aquella �poca y esperamos que las cosas mejoren, sobre todo para los obreros paname�os que puedan vivir con dignidad y con los ingresos suficientes para no sufrir las cotidianas presiones econ�micas que hoy sufre. Feliz d�a.
PUNTO CRITICO |
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