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Las actividades bailables y los paseos a las playas de Barú para el año nuevo fueron suspendidos por el alcalde Franklin Valdés, tras registrarse el sismo de 6.0 en la escala de Richter el pasado 25 de diciembre.
La autoridad basó su decisión en que se desconoce qué va a pasar en los próximos días en el distrito, en consecuencia se le debe brindar la seguridad a la población.
"Estas actividades atraen a mucha gente y no sea que pase algo que lamentar y después digan fueron las autoridades; por eso tomamos la decisión que no va haber ninguna actividad en Barú", mencionó.
Valdés agregó que quienes quieren hacer actividades bailables ese día que se atengan a las consecuencias sin son sorprendidos por la Policía Nacional, porque no hay ningún tipo de permiso para hacer nada y se multarán a las personas que no acaten la medida.
La entrada del Nuevo año no será igual para los residentes del distrito de Barú, quienes a pesar de volver a la calma, se mantienen inseguros porque las más de 350 réplicas que se registraron después del terremoto del 25 de diciembre, ha dejado un sinsabor en la comunidad y para muchos ni casa tendrán para el 2004, porque lo perdieron casi todo. |
