Corea del Norte aceleró su política de “fuerza nuclear disuasoria” el año en el que celebró su 55º aniversario.
El régimen comunista, que forma parte del “eje del mal” perfilado por Bush, anunció que había desarrollado un programa de reciclado de combustible nuclear y que estaba en disposición de fabricar armas atómicas.
Pyongyang exigió a EEUU una garantía de que no iba a recibir un ataque como el que sufrió Irak, pero Washington dejó claro que no aceptaría ningún chantaje. |