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Uno de los moradores del área donde se escenificó la licuefacción muestra las enormes grietas que dejó el sismo navideño. De allí, según explicó, salía agua.  |
El sismo que sacudió a Puerto Armuelles en Navidad, no solo cobró dos vidas humanas y más de 800 viviendas afectadas, sino que provocó en la comunidad de Los Olivos el fenómeno de licuefacción.
La licuefacción es un fenómeno que según el director regional del Sistema Nacional de Protección Civil, José Donderis, se registra cuando el nivel freático de la tierra está alto y en un momento sísmico tras sacudir la corteza terrestre, presenta un efecto semejante a una licuación de tierra con bajo nivel de agua.
Es decir, que el movimiento telúrico provoca que el agua brote de la tierra y se da en condiciones normales del suelo que existe en la región.
Además, agregó que en la visita que efectuaron los especialistas del Instituto de Geociencias de la Universidad de Panamá a esta región agrícola con sembradíos de plátano, consideraron la situación como normal tomando como punto de referencia las características del suelo y su nivel friático.
Las personas que están en el lugar de los hechos se mantienen preocupados por el fenómeno que observaron, minutos después del terremoto y que dejó muchos orificios y rajaduras en la tierra como consecuencia del evento registrado.
Manuel Pinto, fue uno de las personas que descubrió el problema por primera vez en el área, ya que reside en una vivienda a un lado de la carretera que conduce a la comunidad.
Explicó que después del terremoto, salió a la calle y se encontró con la sorpresa que de la tierra emergía agua con arena negra y azul, alcanzando en algunos casos alturas hasta de tres pies o un metro aproximadamente; generando una considerable cantidad de agua que llenó una de las cunetas que están apostados a un lado de la vía.
Lo cierto es que Pinto por temor a lo que estaba ocurriendo dispuso no tocar el agua que salía de las profundidades de la tierra y le avisó a sus vecinos.
Además, confirmó que la licuefacción dejó su evidencia dentro de una finca de plátano en los Olivos y en la carretera, pero las grietas también han quedado como testimonio del terremoto registrado en Navidad en el distrito de Barú, ya que no sólo fue la comunidad de los Plancitos que tuvo grietas hasta de un metro de ancho por tres metros de profundidad y hasta dos kilómetros de recorrido., las cuales dejaron a dos comunidades incomunicadas, según las declaraciones de Eulogio Batista, residente del lugar.
La preocupación en el distrito de Barú no termina, tras conocerse que hasta ayer se registraron 440 replicas desde que el terremoto de navidad sacudió la región con una intensidad de 6.0 grados en la escala de Richter.
Según Donderis, se espera detectar que las residencias afectadas por el movimiento telúrico superen las mil 200, ya que aún hay lugares donde las personas no han reportado los daños provocados porque se han encontrado más de 35 comunidades afectadas.
FAMILIA DE BEBÉ ES OLVIDADA
Por otro lado, se han logrado entregar más de 650 bolsas de víveres a las personas afectadas para tratar de ayudar en parte la situación que están viviendo las familias y se tienen unas mil bolsas más por entregar.
No obstante, a la familia de Angelina Flores, la madre de la menor que pereció en el terremoto a causa de los bloques que terminaron con su vida aún no han recibido ninguna bolsa de comida.
Angelina, dijo que después que los reubicaron, pareciera que no se han vuelto acordar de ella, solo le afirmaron que le iban a dar el terreno junto a una casa, pero las ayudas de comidas que se le prometieron pareciera que han quedado en el olvido.
INCOMUNICADOS
Lo más triste del caso es que en Puerto Armuelles, es que en estos momentos los lugareños se mantienen preocupados porque los pocos teléfonos públicos de monedas que existen en el área están completamente dañados y a pesar de registrarse el terremoto, los funcionarios de Cable & Wirreles no los han reparado.
HERIDOS EN HOSPITAL
En tanto, en el hospital Dionisio Arrocha, el doctor Eduardo Lázaro Achurra afirmó que se han atendido más de 460 personas, de los cuales 86 han sido policontusiones, ocho con fracturas y cinco hospitalizaciones que van hacer atendidos para cirugías y cuatro que fueron trasladados a la ciudad de David. |