Tras la salida del mercado de los dos mejores lanzadores en las Grandes Ligas, Roy Halladay y John Lackey, surge una gran inquietud para los actuales campeones de la Serie Mundial, los Yanquis, sobre a quién podrán conseguir.
Es evidente que los Bombaderos del Bronx, en la actualidad, están carentes en su cuerpo monticular.
Un ejemplo de ello fue toda la postemporada, cuando utilizaron a tres abridores (Sabathia, Burnet y Pettitte), en la que se pudo observar en el clásico de otoño lo desgastado que estaban por falta de descanso.
Hasta el mismo receptor del equipo, Jorge Posada, manifestó al diario La Opinión, su deseo de otro abridor.
"Pienso que (los Yanquis) deberían traer un abridor más para que nos ayude", aseguró el boricua.
A pesar de que Lackey y Halladay ya no están en el mercado, todavía no hay nada perdido con la presencia de figuras como Ben Sheets, Erik Bedard y Brett Myers.
Y si quieren liderazgo junto a veteranía, se encuentran Pedro Martínez, John Smoltz, Randy Johnson, quienes también están en busca de un contrato para el 2010.
Lo interesante será conocer si los "Mulos" están dispuestos en pagar por algunos de estos tiradores, después de gastar más de 400 millones el año pasado por Teixeira, Sabathia y Burnett.
Al parecer, sí lo harán, después de que el Hal Steinbrenner, alto ejecutivo del equipo, quien indicó habrá más ruedas de prensa antes de la campaña del 2010.
"No creo que hayamos terminado porque creo que hay un par de áreas que aún tenemos en cuenta", dijo Steinbrenner. "Siempre nos preocupamos por el "pitcheo". Todos los equipos lo hacen, examinaremos todas nuestras opciones: agentes libres, canjes".