Cerca de 200 activistas fueron detenidos de forma preventiva por la Policía danesa, cuando se dirigían al puerto de Copenhague en una acción enmarcada en las protestas por la cumbre climática y cuyo propósito era parar la actividad comercial de grandes corporaciones contaminantes.
Medio millar de personas se congregaron junto al céntrico Trianglen para dirigirse hacia el puerto, pero un fuerte dispositivo policial frenó a los activistas unos 500 metros más adelante y procedió a las detenciones, por considerar que se trataba de una concentración ilegal y para prevenir posibles incidentes.
La Policía obligó a desalojar la camioneta que encabezaba la movilización, aisló a los manifestantes y procedió a realizar arrestos masivos.
A los activistas les fueron requisados proyectiles, máscaras de gas y "otros objetos de uso ilegal", informó la Policía, que trasladará a los detenidos a un centro creado especialmente para las protestas durante la cumbre climática, que finalizará el día 18.
Organizada por el grupo Climate Collective, la movilización había sido convocada bajo el lema "Golpea la producción".
Las movilizaciones vinculadas a la gran manifestación del sábado, en la que participaron decenas de miles de personas, se saldaron con 968 detenidos, de los que sólo cuatro pasaron a disposición judicial con cargos por agredir a agentes, mientras que el resto fue liberado ayer.
Así mismo una cincuentena de Ministros de Medio Ambiente se reunió en Copenhague con la presidenta de la Cumbre de la ONU sobre el Cambio Climático, la danesa Connie Hedegaard, para aunar posturas sobre un acuerdo que regule las emisiones de CO2.
El borrador que circula desde el sábado en la cumbre prevé un recorte global de las emisiones de gases de efecto invernadero entre el 50 y el 95% hasta el año 2050.