Después de los desastres ocurridos en el país, es necesario evaluar lo que es verdaderamente importante, luego de haber alcanzado el desarrollo económico. Sin duda, dbemos tener claro qué es el medio ambiente.
Se necesitan ahoracambios y ajustes que nos permitan vivir en concordancia con los tiempos actuales. Debemos reconocer que el centralismo gubernamental no da los mejores resultados a pesar de las buenas intenciones de los personeros.
La descentralización del país se hace necesaria, en particular la de los organismos que deben dar respuestas ante situaciones extremas. Los recursos o presupuestos deben estar dirigidos hacia ese punto: la descentralización del poder.
En Costa Rica, por ejemplo, el presidente Oscar Arias, está dando los pasos para convocar a una asamblea constituyente que permita al país enfrentar los retos del siglo 21 con una mejor y mayor organización.
Las contingencias climáticas de los últimos días también nos han permitido descubrir que se hace imprescindible la conformación de una organización con la suficiente autoridad para enfrentar los embates de la naturaleza en el menor tiempo posible.
Un aspecto positivo resultó ser la organización civil, en especial la de los jóvenes, quienes respondieron rápida y eficientemente al llamado de las autoridades. La juventud debe mantenerse motivada para que sus energías sean canalizadas de manera positiva, como en esta ocasión.
A pesar de las pérdidas humanas y materiales, ha quedado demostrado que el trabajo efectuado permitió reducir las posibilidades de que las cifras aumentaran.
Un ejemplo de capacidad de reacción y de trabajo arduo fue dado por el Ministerio de Obras Públicas (MOP). Demostró esta institución su enorme potencial para resolver los asuntos de su competencia en medio del desastre. Debe destacarse además, que esta entidad y la empresa privada, demostraron que se puede trabajar de manera conjunta y obtener magníficos resultados.