Una familia en Colón vivió la pesadilla más terrible de sus vidas cuando uno de sus miembros fue secuestrado el viernes.
La noticia se mantuvo en reserva para evitar que los sujetos hicieran daño al niño que no pasa de los 10 años de edad.
Los secuestradores solicitaron a la familia 300 mil dólares como rescate, dinero que ni toda la familia junta podía conseguir porque son personas humildes que viven a base de su esfuerzo.
El tormento inició el viernes después que el niño salió de la escuela y lo dejaron en su casa. El calvario terminó la mañana de ayer, domingo, cuando una señora lo vio caminando en Los Lagos, corregimiento de La Feria, y lo ayudó a llegar a su casa.
Aparentemente los captores, al saber que la familia no tiene plata, lo dejaron en libertad.
Las autoridades investigan.