Los internos de la cárcel de máxima seguridad de Cantumarca, a cinco kilómetros de ciudad andina de Potosí, en el sur de Bolivia, se amotinaron ayer, porque las autoridades revocaron la autorización para que un equipo de fútbol del penal jugase un partido amistoso fuera del recinto.
Los cerca de 170 reos se amotinaron ayer de mañana después que se suspendiera el encuentro benéfico.