Millones de viajeros se vieron afectados por la mayor huelga ferroviaria en la historia de Alemania, protagonizada por el sindicato de maquinistas GDL, que, tras paralizar casi por completo el transporte de mercancías, esta madrugada inició paros masivos en el transporte público.
El GDL inició la suspensión mayoritaria del transporte de pasajeros en las líneas de cercanías, regionales y larga distancia de Deutsche Bahn, los ferrocarriles alemanes.
La huelga afecta especialmente al este de Alemania, donde se calcula que sólo circula un 10 por ciento de los trenes de pasajeros regionales, mientras en las grandes urbes como Berlín se pasó de 5 a 20 e incluso 40 minutos la frecuencia de la circulación de las líneas de cercanías.