Varias organizaciones civiles mexicanas demandaron al presidente electo de Estados Unidos, Barack Obama, una reforma migratoria que ponga fin a las muertes de inmigrantes en la frontera común, que suman más de 10,000 en los últimos 14 años, según sus estadísticas.
"Queremos que la nueva administración que va a entrar en Estados Unidos, la del presidente Obama, se acuerde de nosotros para tener una reforma migratoria y ya no tener ni una muerte más", dijo Enrique Morones, presidente de Ángeles de la Frontera, la asociación organizadora del evento.
"Nos lo debe", señaló Morones, quien recordó que los latinos residentes en Estados Unidos y con derecho a voto (unos 18 millones) apoyaron en un 80% a Obama en estados que fueron clave para su triunfo electoral, como Florida, Nuevo México, Colorado y Nevada.
El dirigente señaló que esta reforma debería tener como objetivo legalizar a los 12 millones de "sin papeles", la mitad de ellos mexicanos, que viven en EE.UU. y establecer "un modo humanitario" para que los migrantes entren al país sin tener que arriesgar su vida en el desierto.