FAMILIA
"La guerra contra las drogas"
James A. Inciardi
La lista de aquellos que
conocen dicho consumo disfuncional ante los medios de comunicación
tiende a sonar como un extracto de Quién es Quién dentro del
mundo del espectáculo y los deportes. Un conjunto de ellos ha dilapidado
tanto como 1.000 dólares por día en la droga - John Phillips,
fundador del grupo The Mamas and the papas; su hija Mackenzie Phillipis,
quien una vez actuó en la serie de televisión "One Day
at a Time" (Un día por vez); el guitarrista Keith Richards,
de los Rolling Stones; John Lucas, de los Washington Bullets; Carl Eller,
de los Minnesota Vikings; Thomnas "Hollywood" Henderson, de los
Dallas Cowboys; David Crosby, de The Byrds and Crosby, Stills y Nash, y
Stacy Keach, el Mike Hammer de la televisión. En menor medida estaba
Lawrence Taylor, de los New York Giants de fútbol, y el pitcher de
los New York Mots, Dwight Gooden. Y en el extremo estaba la ganadora del
Oscar Julia Phillps, productora de The Sting y de Encuentros cercanos del
tercer tipo, quien gastó más de 1 millón de dólares
en cocaína en un período de 10 años. Phillips se convirtió
en una consumidora consagrada a la cocaína durante la filmación
de 18 horas por día de Encuentros cercanos; en una entrevista de
la revista Time comentó:
No ayudaba demasiado para las relaciones personales y gran parte de este
negocio son relaciones personales. Podía quedarme despierta toda
la noche pensando ideas, pero no era probable que las presentara de la mejor
forma posible. Quiero decir, el tacto se te va por la ventana... Parecía
alguien salido de Dachau. Tenía terribles alucinaciones, especialmente
al caer la noche. Siempre había un merodeador fuera de mi puerta
de calle con malas intenciones y un revólver en la mano. Pensaba
que me salían bichos de debajo de la piel. Mi hija solía seguirme
por toda la casa con un frasco de desodorante echando spray detrás
de mí porque odiaba el olor de la base libre.
POST SCRIPTUME
Es difícil predecir durante cuántos años más
el consumo de heroína y cocaína persistirá en Esados
Unidos. Lo más probable es que dure cierto tiempo. El consumo de
heroína ha estado dando vueltas durante casi un siglo y el consumo
de cocaína durante un período aún más largo.
El tratamiento, la prevención y los esfuerzos por hacer cumplir la
ley han tenido algunos efectos positivos, pero los problemas son tozudos
y recurrentes. La legalización de la heroína y la cocaína
no parecería ser la respuesta, pues ambas drogas son demasiado seductoras
para que se las deje en el mercado libre sin ningún control.
Mirando el futuro, un libreto podría ser palusible. La investigación,
el tratamiento, la educación y la prevención y los esfuerzos
por hacer cumplir la ley respeto del consumo de heroína no han resuelto
dicho problema, sin bien en gran medida parecen haberlo contenido. Como
se señaló antes, el número de consumidores de heroína
estimados llegaba a un nivel de 500.000 a mediados de los años setenta
y se ha quedado allí desde entonces, más o menor.
La cocaína de base libre, concretamente, es un producto químico
diferente de la cocaína misma. Como se detalla en el proceso de transformación
en base libre, el clorhidrato de cocaína se transforma en base en
forma cristalina. Los cristales, entonces, se aplastan y se usan en una
pipa de vidrio especial. Para 1977 se estimaba que había unos 4.000
consumidores de cocaína en Estados Unidos, con una cantidad tan grande
como el 10% de ellos que exclusivamente la consumían en forma de
base libre.


|



|
Firman acuerdo en ciencia penal |