Un postrero tanto del argentino Lisandro López dio ayer al Lyon el empate contra el Liverpool (1-1), un resultado que coloca a los franceses en octavos de final de la competición y que deja en jaque a los ingleses.
El tanto conseguido por el argentino en el 90 condena a los "reds" a vencer en los dos enfrentamientos que les quedan, en Florencia y en Anfield frente el Debrecen para seguir aspirando a mantenerse en la Liga de Campeones y, aun así, su continuidad no estaría asegurada.