Unas 1,300 personas han sido afectadas por las intensas lluvias que han provocado inundaciones, pérdidas en el sector agrícola y daños materiales.
En Soná, la crecida del río San Pablo aisló 14 comunidades y afectó a 430 personas. En Chiriquí, unas 280 personas sufrieron los embates de las inundaciones.
En Coclé, fueron afectadas 280 hectáreas de cultivos de arroz y en Santa María, de Herrera, otras 177 hectáreas quedaron sumergidas. En este último distrito hay 150 personas cuyos hogares resultaron inundados.
En río Caimito de La Chorrera, 10 residencias resultaron inundadas y el puente sobre el río Caño Quebrado se desplomó.
El Centro de Huracanes de Miami advirtió sobre una depresión tropical en el Caribe, que tiene alta probabilidad de convertirse en ciclón o tormenta tropical en las próximas 24 horas, y que podría afectar a Panamá y a otros países de la región.