"Casi la mitad de los hombres entre 45 y 75 años presenta unos niveles de testosterona, la hormona sexual masculina, por debajo de lo normal, lo que afecta su calidad de vida" asegura el urólogo Carlos Andrade.
Es más, en los próximos años se estima que 3 de cada 4 varones menores de 80 años padecerán de este problema.
El Síndrome por Déficit de Testosterona (SDT) se manifiesta con cansancio, acaloramiento, depresión, irritabilidad, trastornos del sueño, disminución del impulso sexual y la función eréctil, reducción de la fuerza muscular y aumento de la grasa corporal.
En ocasiones, los síntomas se presentan en forma muy leve por lo que los hombres no acuden al médico. Otro aspecto importante para la no detección de este problema es que muchas veces se asocia a consecuencias normales de la edad y no como una afección que puede tratarse.
La testosterona es fundamental en la formación de los músculos, la regulación de la grasa y la insulina o la función sexual. La alteración de sus niveles produce efectos perjudiciales y enfermedades graves como diabetes, síndrome metabólico, además de incrementar el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares.
La existencia del SDT sólo se confirma mediante un test de los niveles de testosterona en el individuo y su tratamiento consiste en la administración de testosterona mediante inyecciones, parches o gel, lo cual permite a los pacientes administrarse la dosis cómodamente.