Hoy sábado 12 de octubre, hace 40 años, en un día viernes a las 3:00 de la tarde de 1962, fue abierto por primera vez el tránsito vehicular la obra de ingeniería y arquitectura más importante del Istmo después de la construcción del Canal de Panamá; el Puente de Las Américas a un costo de 20 millones de balboas. Desde entonces se constituyó en el principal eslabón de la carretera Panamericana.
La inauguración formal se realizó a las 9:30 de la mañana y estuvo a cargo del entonces ministro de Obras Públicas, señor Max Delvalle en representación del Gobierno Nacional que presidía Roberto F. Chiari. Al acto asistieron el gobernador de la antigua Zona del Canal, Robert Fleming y altos dignatarios de los gobiernos de Panamá y los Estados Unidos de Norteamérica.
Los diarios locales de aquella época, reportaron que cinco horas después de su formal inauguración, una multitud de panameños motivados por la curiosidad, la admiración y el entusiasmo se acercaron a ver, desde muy cerca, el funcionamiento de la portentosa obra.
El asombro que envolvía a la ciudadanía en ese momento fue tan grande... que un policía zoneíta comentó con júbilo: "es lo más nuevo que hay en el Istmo" describió la decana de la prensa panameña.
Vehículos de todo tipo, especialmente los modelos americanos, que eran los que predominaban en la década del 60 del siglo pasado, circulaban por la nueva estructura con sus conductores ligeramente nerviosos, pero regocijados, ante una muchedumbre que los observaba impactada por la novedad.
Dentro de las 24 horas siguientes no se reportaron accidentes en los predios del puente y desde muy temprano, una gran cantidad de peatones aprovecharon el fin de semana para pasear por la estructura.
Los jóvenes de hoy deben saber que el Puente de Las Américas en su primeros días fue bautizado por sus constructores con el nombre de "Thatcher Ferry Bridge" en recuerdo de los primeros "ferrys boat" que dieron el servicio de trasladar los primeros vehículos de una ribera a otra.
Un día antes de su inauguración, grupos estudiantiles universitarios anunciaron concentraciones para reafirmar la soberanía panameña y emitieron sendos comunicados donde planteaban sus posiciones nacionalistas y patrióticas, sobre todo, oponiéndose a que esta estructura llevase el nombre de Thatcher Ferry Bridge".
El diario "El Panamá América" del 12 de octubre de 1962, que consultamos en la hemeroteca de la Universidad de Panamá, para documentarnos en la preparación de este reportaje, informó a la sazón que la leyenda colocada en la salida del puente, viajando hacia el interior, fue alterada tanto en inglés como español. Le arrancaron las palabras "Thatcher Ferry Bridge", quedó únicamente la inscripción "Uniendo las Américas" y nunca se supo quien o quienes fueron los autores de estas alteraciones.
Sin embargo, se impuso el sentimiento patriótico de los panameños y desde entonces el nombre de "Puente de Las Américas" quedó grabado en el pueblo porque representó el lazo físico que unió permanentemente los segmentos de América que fueron separados por la construcción de la vía interoceánica.
En esta memorable fecha, también muchos panameños recordarán aquellos momentos de nuestra historia patria y sentirán las nostálgicas remembranzas de sus travesías por los cuatro ferrys que funcionaron en aquella época: el Thatcher, presidente Amador y presidente Roosevelt y presidente Porras, los cuales los transportaban desde el sector de la Boca hacia la ribera oeste de la vida interoceánica.
Después de 40 años de funcionamiento, el puente de Las Américas ya no tiene la misma capacidad de desalojo vehicular de antaño, debido al rápido crecimiento de la población y el aumento de la flota de vehículos que diariamente se desplaza por la estructura desde la ciudad capital hacia el interior del país y viceversa.
En los albores de este siglo, no obstante, ha surgido una nueva esperanza dirigida a mejorar la calidad de vida de los panameños y al mismo tiempo a solucionar de forma permanente el grave problema de congestionamiento vehicular que atraviesa la ciudad de Panamá, se trata de la construcción del segundo puente sobre el Canal de Panamá.
La presienta Mireya Moscoso a través del Ministerio de Obras Públicas han puesto en marcha este importante megaproyecto por un monto de 91 millones de balboas y se espera que su construcción finalice en el centenario de la República y por aunque es probable que está magna obra no esté culminada en esta efemérides patria, el impulso que se le ha dado, ha recibido la total aprobación de la sociedad panameña.
En el 2003 ó 2004 cuando esta nueva obra finalice, la nueva generación de panameños también querrán sentirse orgullosos y regocijados en el Centenario de la República, tal como lo hicieron los compatriotas que tuvieron la experiencia de participar en la construcción del Puente de Las Américas y los que presenciaron su apertura el 12 de octubre de 1962. |