La administradora del cementerio municipal, Marisol Sanrouse, advirtió que no asumirá ninguna responsabilidad en los reclamos que formulen los familiares de difuntos sepultados en este campo santo sobre trabajos deficientes en la construcción de bóvedas, construcción de cruce y otros que son efectuados por personal ajeno a la administración municipal.
Resulta extraño, dijo Sanrouse, que personas sin ningún tipo de material de construcción o herramientas y que diariamente acuden al cementerio municipal puedan ofertar rápidamente a los dolientes cruces, alegando que la práctica adoptada es "coger una cualquiera", al igual que se está haciendo con potes y otros adornos y venderlos.
Indicó que en la puerta del cementerio se han encontrado verjas y vidrieras, presuntamente sacadas de otras tumbas, por lo que se ha informado de ello a las autoridades correspondientes.
En tanto, reiteró el llamado a los deudos para que se abstengan de efectuar negocios con estas personas.
Sanrouse indicó que previo al 2 de noviembre, día de los difuntos, se incrementa el número de personas que cobran por pintar, limpiar, dibujar letras y levantar cercos para las sepulturas, muchas veces hurtando material perteneciente al municipio o de otras personas y son reiterativas las denuncias recibidas en contra de este grupo de personas.
Con anterioridad se interpuso una denuncia ante la Policía Técnica Judicial (PTJ) de La Chorrera en contra de una persona que se dedicaba a realizar exhumaciones de cadáveres de forma clandestina y que cobraba cierta cantidad de dinero a los familiares, sin la autorización de la administración del cementerio municipal. |