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Evander Holyfield a la hora del pesaje. En la parte posterior James Toney, quien promete ganar por la vía rápida.  |
Aunque se intenta vender como el gran choque entre fuertes aspirantes al título pesado, el combate entre los estadounidenses Evander Holyfield y James Toney promete más bostezos que aplausos, algo que se ha hecho habitual en una categoría donde los buenos púgiles son cada día más escasos.
Holyfield, un ex campeón que ya vio pasar sus mejores días entre las cuerdas, y Toney, un peso crucero de buena pegada y escasa técnica y que intenta dar el salto a mayores bolsas, pelearán el sábado en Las Vegas (Nevada), en un desafio eliminatorio de los supercompletos, de la Federación Internacional de Boxeo (FIB).
Holyfield ha ganado sólo una de sus últimas cinco peleas, pero aún así se aferra -con ayuda de promotores como Don King- en la quimera de convertirse en el único hombre que ha ganado cinco veces la faja de los pesos pesados.
Toney, quien estuvo ocho años sin conseguir un combate titular antes de capturar el trono de los cruceros de la FIB, intentará demostrar que puede reinar también en los pesados.
A punto de cumplir 41 años el 19 de octubre, Holyfield cree que aún puede vencer a los tres mejores actuales campeones en este peso: el británico Lennox Lewis (CMB), los estadounidenses Chris Byrd (FIB) y Roy Jones (AMB).
"Mi objetivo es ser campeón mundial nuevamente y convertirme en campeón indisputado del mundo. He estado peleando por 13 años, he tenido mis altas y mis bajas, y ya no tengo que probarle nada a nadie", expresó Holyfield.
Holyfield (38-5-2, 25 nocáuts) pareció en ese pleito estar recuperado de su operación en el hombro, pero de todas formas dio señales de desgaste en sus más recientes peleas.
Su única victoria desde agosto del 2000 fue por decisión técnica sobre el también 'bulto' Hasim Rahman, en junio del 2002.
Toney (66-4-2, 42 kos) va por un escalón más alto en su carrera luego de que el 26 de abril último ganara una votación unánime sobre el hasta entonces invicto kazajo Vassiliy Jirov, para capturar así la faja crucero de la FIB.
Por otra parte, Toney es casi tres centímetros más bajo que Holyfield, algo que espera contrarrestar a base velocidad y su habilidad. |