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CREO SER UN BUEN
CIUDADANO
Sin embargo, mantengo mi vecindario y hogar sucios
Hay gente así: feliz entre la inmundicia. Por eso vemos que sin sonrojo los conductores de vehículos, y sus pasajeros, tiran basura cuando el carro va en movimiento, llenando las ciudades, sus calles y carreteras de basura y convirtiendo los ambientes donde viven en verdaderos muladares. ¡Y las autoridades no hacen nada! Si ya se sabe que la gente no va a poner la basura en su lugar por las buenas ¡oblíguenlos! Mediante rígidas normas se puede poner orden; multando a los cochinos, se les puede traer al redil, para marcar de esa manera el paso inicial de una marcha larga y dolorosa hacia la construcción de un mejor país. Es necesario el concurso de todos para que camine el proyecto de una nación nueva.
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