"La CIA miente", dice ex jefe chileno de inteligencia

Agencias
Internacionales
El ex jefe de la policía política chilena de la dictadura de Augusto Pinochet acusó a la Central de Inteligencia de Estados Unidos de "mentir" en un informe que la agencia envió al Congreso de ese país, donde lo señala como su "informante". Documentos de la CIA difundidos el martes acusan al retirado general Manuel Contreras de haber sido un colaborador regular de la CIA y, en una ocasión, remunerado por sus servicios. Contreras, en una entrevista telefónica con Reuters desde la cárcel especial en que está recluido, dudó incluso que el informe fuese efectivamente de la policía secreta estadounidense. "Si la CIA desarchivó y si efectivamente es cierto eso (el documento), está mintiendo", dijo el ex director de la Dirección Nacional de Inteligencia (DINA). El ex general cumplirá en enero del 2001 una condena de siete años como autor intelectual del crimen del ex canciller chileno Orlando Letelier y la estadounidense Ronnie Moffit, en Washington en 1976. Contreras ha sido vinculado también al asesinato del ex comandante en jefe del ejército chileno, Carlos Prats, en Argentina, y a un atentado en contra del ex vicepresidente Bernardo Leighton en Roma, en 1974 y 1975, respectivamente. El ex jefe de la DINA negó su supuesta vinculación con la agencia de inteligencia norteamericana, argumentando que en 1978 Estados Unidos pidió su extradición a la justicia chilena, pero en ninguno de los 180 documentos presentados aludió a su relación con la CIA. "Sólo me están involucrando ahora, si no, lo habrían dicho en aquella época", sostuvo. Contreras dijo que las acusaciones son una "venganza" por datos que él proporcionó a la Agencia Federal de Investigaciones (FBI) de Estads Unidos, que probarían que la CIA fue la verdadera responsable de los asesinatos de Letelier y Prats y del atentado a Leighton. En abril de este año, Contreras entregó una declaración extrajudicial a dos fiscales estadounidenses que viajaron a Chile, como parte de las indagaciones que realiza la justicia de ese país por el asesinato de Letelier. Paralelamente, la justicia italiana ha pedido su extradición como inculpado por el intento de homicidio de Leighton. "No creo (que puedan extraditarme) porque no hay motivo", afirmó Contreras al responder a una pregunta. Sobre sus vínculos con la CIA, el retirado general reconoció que hubo "contactos", pero sólo a nivel "de servicios". "Yo tuve, como DINA, contacto con 37 servicios de inteligencia en el mundo (...) Yo tomaba contacto con el general Vernon Walters, por ejemplo, entonces yo también podría decir que Vernon Walters era informante mío", reclamó airado, aludiendo al entonces director adjunto de la CIA. "Establecen (en el informe) que me pagaron el año 75.No dicen cuánto se pagó, quién lo pagó, cómo lo pagaron, cuándo lo pagaron y dónde lo pagaron, porque no es cierto", añadió. Negó también la existencia de la llamada Operación Cóndor, una red de cooperación entre los aparatos represivos de las dictaduras sudamericanas para seguir la huella de los disidentes que abandonaban sus países de origen, por la cual está acusado el ex jefe directo de Contreras, Augusto Pinochet. "No, en absoluto (hubo coordinación entre los aparatos represivos sudamericanos y la CIA)", dijo. Contreras fue un funcionario de la exclusiva confianza de Pinochet, quien lo nombró en su cargo y a quien, según confesó el propio ex jefe de la DINA, informaba diariamente de sus actividades. Múltiples procesos judiciales señalan a la DINA como la principal responsable de violaciones a los derechos humanos y desaparición de personas en los primeros años de la dictadura que imperó en Chile, entre 1973 y 1990. El ex jefe de la DINA también rechazó esa acusación. "Todos estos desaparecidos están muertos y enterrados por los propios extremistas, siguiendo las enseñanzas del manual del Che Guevara", dijo.
|