La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Louise Arbour, instó al Gobierno de Estados Unidos a que cierre los centros de detención secretos que están bajo el control de sus servicios de inteligencia.
El presidente de EE.UU., George W. Bush, reconoció que la CIA tiene cárceles secretas en distintos lugares del mundo, en las que aseguró que los servicios secretos han interrogado a importantes sospechosos de terrorismo.
Arbour agregó que ese tipo de detenciones crean "las condiciones para que se produzcan otra clase de conductas abusivas".