Más que con los pies, la cabeza o el físico, Panamá tiene que jugar mañana con el alma para sacar al menos el empate en territorio de los "Reggae Boyz".
Llegamos sin punto alguno a este partido y con la incertidumbre desatada en la última semana sobre la continuidad en el banquillo de Panamá del técnico colombiano "Cheché" Hernández.
Todas estas son situaciones negativas que perjudican el engranaje del equipo para un partido tan importante como el que jugaremos en tierras caribeñas.
A Jamaica hay que jugarle con precaución. Ojo, no es El Salvador.
El seleccionado caribeño es un equipo más ofensivo y que cuenta con figuras en las más importantes ligas de Europa.
Dentro de sus jugadores sobresalen nombres como Marlon King, Ricardo Fuller y Deon Burton, tres goleadores peligrosos.
Se suman a ellos Andy Williams y Ian Goodison, autor del gol ante Estados Unidos. Según el diario The Jamaica Observer el conjunto local alineará frente a Panamá con tres delanteros. Así que cuidado "Cheché".
Para contrarrestar la velocidad del conjunto de casa, primero se debe mantener el orden y marcar en zona al conjunto jamaiquino, ya que por la velocidad de los morenos vamos a pasar muchas dificultades en ese partido. De eso no cabe la menor duda.
Por eso hay que jugar con más corazón que técnica, con más alma que táctica en este partido, porque para obtener un punto en esa difícil visita debemos poner mucho más que fútbol sobre el terreno de juego.
Mañana, pasada las nueve de la noche, sabremos el destino de Panamá. Vamos a rezar por nuestra "sele", necesitamos recobrar la fe perdida. Por eso, aguardamos por un buen resultado.