Con gran emoción, dignidad y recogimiento, miles de martiniqueses se unieron en duelo por las 160 víctimas, incluidos 152 habitantes de la isla, del reciente accidente aéreo en Venezuela.
El estadio Dillon de la capital de Martinica, con capacidad para unas 30.000 personas, estaba repleto para este "homenaje nacional", que duró unas dos horas, bajo un sol de justicia.
Unos 1.500 familiares y allegados de las víctimas estaban sentados debajo de carpas blancas en el estadio. En las gradas también dominaba el blanco, color del luto.
En la tribuna de honor estaban sentados los presidentes de Francia, Jacques Chirac, y de Venezuela, Hugo Chávez.