El presidente Robert Mugabe acusó a los países occidentales de hipocresía por criticar su plan de entregar las tierras confiscadas a los agricultores blancos a los negros, a pesar de su propio racismo. Mugabe dijo que respondía a Estados Unidos, Australia y Nueva Zelanda, que exhortaron a otros países a imponerle sanciones.
La campaña del gobierno para expulsar a los agricultores blancos se produce luego de más de dos años de turbulencia política que ha provocado 186 muertes, principalmente de opositores políticos. Entre los muertos, hay 11 agricultores blancos, descendientes de colonos europeos. |