Saludos para todos.
Doy las gracias a los que me han escrito dando su opinión o sugerencia.
En realidad, un gran porcentaje de estos escritos se basan en nuestra experiencia y la de compañeros (personas con discapacidad).
Cada día confirmamos algunas de las verdades que por aquí les damos a conocer, en días pasados me encontré en una de nuestras avenidas y, por supuesto, yo andaba en mi silla de ruedas, de pronto escuché un grito quítate de la calle y ve para tu casa como si yo no tengo derecho a salir porque estoy en una silla de RUEDAS.
Con relación a la familia y las ENFERMEDADES PROLONGADAS, PERSONAS CON DISCAPACIDAD Y ENFERMOS EN CAMA: en el SEGURO SOCIAL dan unas charlas y orientación de cómo tratar a las personas en estas condiciones, ellos llevan un registro y los invito a que investiguen cuál de mis familiares ha ido a esas charlas. Ese es uno de los indicativos del poco me importa de los familiares.
Otro asunto es la comodidad que se requiere o el acondicionamiento del entorno para la mejor forma de vida, yo una vez tuve que irme a un tercer piso de una renta porque no se me permitía hacer un baño y poder entrar con mi SILLA DE RUEDAS.
He anotado lo anterior porque la gran mayoría de los programas van dirigidos a PERSONAS CON DISCAPACIDAD Y SU FAMILIA, seguro estoy que muchos de nosotros sin ese apoyo familiar es imposible calificar para muchos de esos programas o proyectos.
Parece increíble, pero sé de madres que paradas frente a la cama de un hijo con discapacidad le han gritado cualquier cantidad de improperios.
Qué difícil es creer estas verdades que para mucho es prohibida y poder así vivir una vida fingida.
Continúa.
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