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Rosa Alba Hernández Garay, de tres años, murió el fin de semana en una zona rural del departamento de Santa Ana, en el oeste de El Salvador, cuando un muro que fue dañado por los terremotos ocurridos hace siete meses se desplomó cuando la niña transitaba por una calle con familiares.
En el accidente, ocurrido el sábado por la noche, resultaron gravemente lesionadas la madre de la niña, Silvia del Carmen Garay; una hermana, Mónica Guadalupe, de ocho años, y una tía, Griselda de Garay, mientras que la bisabuela materna, Faustina de Garay, de 101 años, falleció el domingo por el impacto emocional de la noticia.
Una fuente de la Policía Nacional Civil (PNC) informó ayer que el muro, que había quedado agrietado por los terremotos que sufrió el país en enero y febrero pasados, se derrumbó después de que fuertes lluvias. |
