La violencia doméstica termina cuando se denuncia.
Muchos hogares panameños son víctimas de la violencia intrafamiliar que se traduce en el abuso hacia la pareja o hacia los hijos u otro familiar.
La violencia doméstica es un problema muy serio, ya que causa lesiones de diversos tipos.
Las víctimas pueden sufrir lesiones físicas, como hematomas o fracturas óseas. Pueden sufrir emocionalmente de depresión, ansiedad o aislamiento social.
Para evitar ser presa de ese flagelo, hay que denunciar el mal ante las autoridades.