El contralor Alvin Weeden remitió una carta en duros términos a la procuradora Alma Montenegro de Fletcher, en el que señala que es "deplorable que emita, con frecuencia, opiniones jurídicas sobre tópicos distintos de la interpretación de la Ley".
La reacción de Weeden surgió al responder los criterios expresados por la procuradora, sobre la solicitud de la Contraloría, de suspender la inclusión de gastos de representación en la bonificación que paga anualmente la Lotería Nacional a sus funcionarios.
A juicio del contralor, Alma Montenegro de Fletcher al pronunciarse sobre esa materia, excede los límites de la facultad que la Ley 38 de 31 de julio de 2000, le otorga a la Procuraduría de la Administración y que se circunscribe a la labor de consejera jurídica de los servidores públicos administrativos. |