El Gobierno me ahorró cuarenta balboas, el otro día. Resulta que había tratado de vacunarme contra le influenza y siempre estaban llenos los centros de salud.
Uno de estos sábados, en Pueblo Nuevo, me vacunaron. Hay que reconocer el trabajo del Ministerio de Salud en prevenir los efectos dañinos de estas epidemias.
Imagino que muchos miles de balboas se han invertido, pero se justifican, sin lugar a dudas. No entiendo cómo en clínicas privadas cobraban cuarenta balboas por esta vacuna.
Hay que ser previsor y evitar las epidemias. Por lo tanto, no se debe "bajar la guardia" y revisar cómo andan el polio, tuberculosis, viruela y otras enfermedades que, se supone, ya desaparecieron.
El pueblo comprendió el mensaje de Salud y acudió masivamente a vacunarse.
Pero donde este Gobierno no ha tenido una actitud previsora es con los próximos carnavales.
Muchos sostienen que luego del Martes de Carnaval, hay que comenzar la organización de los próximos. Así lo hacen en Las Tablas y les sale bien.
Fue lamentable que el nuevo gobierno no organizara los pasados carnavales. Recuerden que lo único que toman en serio muchos panameños, es esa fiesta.
Menos mal que al final pagaron las deudas del particular que dio la cara por los organismos de gobierno, que no se atrevieron a organizar tan importante evento....
Hay que insistir en que una autoridad de mando debe tener alguna idea de cómo se maneja su institución.
Sería recomendable que antes de entrar a la institución, recibieran un seminario sobre los principales aspectos administrativos.
Así se evitaría la conocida excusa de que están aprendiendo el manejo de la institución... o simplemente ¡echarle la culpa de lo malo al gobierno anterior!
Comprendo que se alegue que hay cargos que deben manejarse "políticamente". Lo malo es que en este país lo que sobra es la politiquería, que es muy negativa.
Nadie puede negar el hacinamiento de nuestras cárceles. Siempre pienso que si las autoridades fueran más efectivas en detener los maleantes, no habría sitio donde encerrarlos.
Lo que todavía no me convence es destinar ciento cincuenta y cinco millones para hacerles cárceles a nuestros malandros.
Con ese dinero ¿no podían comprarse varios edificios de departamentos que están vacíos y ponerles seguridad?
Claro que los que irían a esas modernas cárceles deben ser escogidos por su buena conducta.