La tranquilidad de la comunidad de Quebrada Bonita en la provincia de Colón, se vio interrumpida la noche del viernes, por el homicidio de Héctor David Batista, de 22 años.
El malogrado joven fue asesinado de varias puñaladas en el mencionado lugar.
A su abuela, Guillermina Camaño Rodríguez, le tocó la dolorosa y nada agradable tarea de identificar a su nieto y taparlo con una sábana.
El cuerpo sin vida de Héctor quedó en el centro de la carretera rural del área, ante la mirada triste de todos los residentes que sabían que tal vez alguien del lugar le quitó la vida.
La abuela Guillermina dijo que su nieto viajó a la comunidad para quedarse algún tiempo, porque ya había finalizado un contrato como obrero de la construcción y pretendía quedarse en la casa con ella.
El dolor de la madre, Vielka Judith Bastista, era indescriptible, porque no podía creer que a su hijo lo habían asesinado de forma tan cruel. "Quiero ver a mi hijo, por favor", le imploraba una y otra vez la madre de la víctima a las unidades policiales.
Nadie pudo explicar en ese momento quién lo mató, pero horas después las llamadas llegaron rápido a la Policía Nacional para informar donde estaba el supuesto asesino, el que al día siguiente fue detenido
Los familiares de Héctor David Batista exigieron a las autoridades justicia.