Algunos conductores de "diablos rojos" no respetan el reglamento del tránsito.
En la Avenida Tumba Muerto, un autobús de Veranillo se pasó la luz roja de un semáforo e iba "como alma que lleva el diablo" y casi atropella a un señor que iba a cruzar la vía, según denunció un lector de "Crítica".
En el área comercial de El Dorado y Plaza Mirage, los peatones tienen que sortear como sea a los automóviles para cruzar de una parada a la otra porque no hay cortesía vehicular.