El seleccionador alemán, Joachim Löw, compareció sereno pero exultante en rueda de prensa tras la victoria sobre Inglaterra (4-1) que le dio a su equipo el pase a cuartos de final, y señaló que sabía cómo hacerle daño al equipo de Capello.
"Sabíamos que podíamos golpear a Inglaterra al contraataque, porque estaban abiertos", explicó Löw, que reconoció que su equipo tuvo suerte después de que el árbitro no diese por bueno un balón de Lampard que golpeó en el larguero y entró medio metro en la portería alemana para después volver a salir.
"Le dije a mi equipo en el descanso que necesitábamos intentar marcar un tercer gol", señaló Loew, consciente de que "los Pross" se habían venido arriba y podían convertirse en un equipo muy peligroso.
"Controlamos claramente el partido hasta el gol de Inglaterra, luego hubo una corta fase crítica", reconoció. "Nuestros jugadores desarrollaron (el plan) brillantemente".
Por su parte, el organizador de los germanos, el centrocampista del Bayern Múnich Bastian Schweinsteiger dijo que estaba orgulloso del trabajo realizado contra Inglaterra.
"Estoy muy orgullo del equipo y de lo que hemos en los noventa minutos", añadió, resumiendo así el sentir del vestuario alemán.