El veterano de guerra Gleen Pincer, de 71 años, fue asesinado de varias puñaladas y golpes por delincuentes.
El norteamericano, que residía en Villa Limón, en Colón, se encontraba solo en el momento en que delincuentes entraron a su casa estilo norteamericana.
La esposa de Gleen, que es enfermera, estaba cuidando a su madre que estaba indispuesta y al regresar a casa se encontró con la mala noticia de que habían asesinado a su pareja.
El norteamericano se encontraba sobre un charco de sangre y tenía múltiples golpes.
Los maleantes se llevaron una laptop y una cámara digital entre otras pertenencias de valor.
Un familiar de la viuda dijo que ya le había dicho que tenía temor por ellos por el clima de violencia, y como vivían en un lugar apartado pensaban que los delincuentes podían llegar a ese sitio.
El Ministerio Público investiga.
