Con danzas, cánticos y las más arraigadas tradiciones y expresiones del folclor interiorano, el pueblo de La Villa de Los Santos, le rindió tributo al Cuerpo y Sangre de Cristo, mejor conocida como Corpus Christi.
Este acontecimiento religioso busca su equilibrio entre el significado del sacramento de la Eucaristía y la forma única en que los feligreses de este pueblo llegan hasta el templo, venciendo el mal y reconociendo en el Cuerpo y la Sangre de Cristo.
TRADICION CRISTIANA
Las danzas heredadas desde la época de la colonia, como la montezuma española, el zaracundé, los diablicos limpios y sucios, entre otras, siguen conservando su esencia y de una forma espontánea y popular, el diablo mayor emprende la lucha contra el ángel Miguel en la batalla del bien y el mal.
CELEBRACION
Arístides Burgos, folclorista de la región, manifestó que esta es una tradición cargada de historial, explicó que con la conquista del nuevo mundo el legado de creencias religiosas y costumbres españolas llegó a América expandiéndose hasta el pueblo de La Villa.
Desde que se acerca la celebración del Corpus, los lugareños comienzan a preparar los altares por donde pasa el Santísimo Sacramento.
Una gran cantidad de visitantes llegan a La Villa de Los Santos para presenciar el despliegue de danzas y espectáculos folclóricos, año tras año los lugareños se esfuerzan en propagar esta tradición cristiana, preparando todos los detalles para esta gran fiesta popular que encuentra su equilibrio entre la religiosidad y la tradición como el mejor legado de sus antepasados.
CEREMONIA RELIGIOSA
El Santísimo fundamenta la fe católica, es puesto en el centro de la celebración, mientras los bailes y danzas de la región le rinden homenaje, con vestuarios llamativos y cargados de color van entrando en el templo, y de rodillas ante el Sacramento le manifiestan reverencia y respeto.