La siempre olvidada Darién ofrece a gritos una riqueza cultural que envidiaría cualquier nación del mundo. Su historia, su cultura y el legado folclórico de estos panameños es invaluable.
Una de las regiones más ricas en esta materia es Garachiné, donde nacieron el Bunde, el Bullerengue y en donde aún se celebra el Corpus Christi, con danzas populares y con matices religiosos.
PERO TODO ELLO ESTA EN PELIGRO DE PERDERSE.
Raúl Forde, un garachineño residente en la capital, conversó con Nuestra Tierra y dejó saber que -desde hace unos años- se ha organizado el Club Cívico de Garachineños Residentes en la capital, el cual preside y que fue creado con la intención de rescatar esos tesoros que hacen de Garachiné un relicario de tradiciones, que representan la cultura darienita en su conjunto.
Desafortunadamente, Garachiné presenta grandes problemas sociales que impiden el desarrollo de gestiones culturales.
Como ejemplo, Fordes manifestó que el grupo se ha dado a la tarea de investigar sobre el origen de Bunde, una expresión bailable que rememora el nacimiento del Niño Dios, cuyo génesis era incierto; además se ha recopilado información de la danza de Gran Diablo de Garachiné, que - aunque con carencias- todavía salen cada jueves de Corpus.
Todo esta información ha sido plasmada en una obra, bajo el título "Las mercedes de Garachiné, Darién, historia, cultura y folclore", de la autoría de Fordes, que es, según él, un primer intento del Club por rescatar todo lo que hoy peligra con perderse en el tiempo. Quien desee colaborar puede llamar al 6630-2015.