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Bolívar Barrios  |
Allá en el Pueblo de Las Cocobolas de Las Tablas, provincia de Los Santos, hace ya varios años, la gente se deleitaba escuchando la voz de un mozo de unos 14 años. Los pedazos de versos aprendidos por el novel trovador eran acompañados por incesante chirriar de los ejes de la vieja carreta tirada por sumisos bueyes en la que se transportaba.
Don Manuel Barrios (Q.E.P.D.) había escrito varias décimas y al morir su hijo Bolívar Barrios tomó el viejo cuaderno aprendiéndose los versos fruto de la creación de su progenitor. Y así en las duras faenas, por las calles polvorientas o lodosas de Las Cocobolas los iba desgranado al viento, para disfrute de los habitantes del lugar.
Así empezó a cantar décimas una de las figuras más sobresalientes de este género de nuestra cultura vernácula. Bolívar Barrios es una de las sólidas columnas que soportan el arte de interpretar la trova.
Allá en su pueblo natal se paseaba en su carreta acarreando todo tipo de materiales y productos alimenticios. Y allí en su carreta iba cantando: "A veces me iba de Las Cocobolas a Lima en Pedasí, salía a las dos de la tarde y llegaba allá como a las 9:00 de la mañana del día siguiente".
Y por los caminos iba cantando los versos que escribió su padre Don Manuel. Allá en los Santos se ganaba la vida, rodando con su carreta o "tirando" machete.
Y cierta vez que los parroquianos Poli y Agapito Vergara lo oyeron cantar y como lo hacía bien lo animaron a que subiera a una tarima. Y así empezó a distinguirse como uno de los maestros en el arte de la trova panameña.
AL PIE DE LA LETRA
No hay aficionado al canto de la décima que no conozca, haya oído cantar o hablar de este señor de las tarimas, a quien los presentadores han bautizado como "Pecho de Oro" por su particular forma de cantar.
Dimas Ascanio Oda, organizador de espectáculos de cantaderas lo define como una de las lumbreras de este género, quien mantiene la claridad de su voz y saloma que lo distinguen como cantante.
Una de sus características como es que se aprende al pie de las letras los temas que expone, lo que le da prestancia y seguridad en sus presentacines.
Al cantor también le adornan otras cualidades según Oda. Es una persona muy respetuosa con los empresarios, con el público y los cantantes que alternan con él.
En la interpretación sabe acompasarse muy bien a los torrentes de los guitarristas o mejoraneros que les acompañan. Pasados los torrentes reglamentarios como el mesano, el gallino, el zapatero y el lamento, Barrios se inclina en su interpretación por el seis maulina.
UN ARCHIVERO PRODIGIOSO
Durante su trayectoria como cantor, Don Bolívar Barrios se ha aprendido más de mil décimas de distintos autores.
Bolivar Barrios defiende a capa y espada la integridad de la décima. Para que ésta resulte agradable en su opinión debe ser aprendida. Es un cantante que repudia y rechaza la grosería, la vulgaridad y el irrespeto en una tarima.
Este concepto lo resume en una de las décimas escritas por el gran poeta Fello Quintero. Uno de sus pies dice:
"La mejorana es sagrada cantémosla como es con orgullo y sencillez y una saloma adecuada no hay que añadirle tonada hacer eso es un error y un abuso ante todo es como manchar con lodo las páginas del folclor". |