Con los constantes cambios de clima que tenemos en nuestro país, es normal que niños, jóvenes y adultos se enfermen de gripe; sin embargo, es sencillo no adquirir la infección, sólo basta una alimentación balanceada que incluya ciertos alimentos que proporcionan al organismo nutrientes que lo hacen más resistente.
Y es que nadie quiere padecer gripe, primero por los terribles síntomas y segundo por la debilidad (dependiendo de las defensas).
La gripe o influenza ocasiona fiebre, escalofríos, tos, dolores corporales, dolores de cabeza y algunas veces dolor de oídos o problemas de sinusitis.
Por lo general, tener un resfriado es estar una o dos semanas con los malestares, pero existe un grupo: los bebés y los niños menores de cinco años, las personas mayores de 65 años adultos y niños(as) con problemas de salud, como diabetes y asma que pueden durar mucho más tiempo, a pesar de los medicamentos que pueda recomendar el médico.
En este sentido, médicos de medicina general y también algunos nutricionistas, recomiendan a los padres de familia dar una alimentación variada a sus hijos, no basada solo en grasas, sino también en proteínas.
Según estudios realizados es ideal comer:
Frutas: De cualquier tipo, pero especialmente cítricos. Aconsejan ingerirlas a la mañana y a media tarde, en jugo o trozos. Frutas hay por montón, pero las más recomendadas son el pomelo, la mandarina, la naranja, el kiwi, el mango y la banana.
Frutos secos: Los expertos aseguran que también son efectivos contra los resfríos, debido a que proporcionan vitaminas, grasas saludables y energía para mantener la temperatura del organismo. Entre las más recomendadas tenemos las almendras, avellanas o nueces, entre otras.
Vegetales: Recomiendan los de hoja verde oscuro y naranja o rojo. Todos ellos son ricos en vitamina A y C, betacaroteno, fibras y otros nutrientes.
Legumbres: Los expertos aconsejan comer al menos dos veces por semana garbanzos, porotos, lentejas, habas, etcétera.
Pescados: Son ricos en grasas saludables como Omega 3 y Omega 6. Eso se consigue en el atún, salmón o sardinas.
Otros productos que aportan proteínas al organismo, necesarias para tener defensas fuertes, son las carnes magras, los huevos, los lácteos, las carnes blancas y la soja.
Si acostumbra a sus pequeños a comer alimentos saludables, notará que su condición física mejorará a medida que vaya adquiriendo más edad. Recuerde, no se deje llevar por ese dicho del padre complaciente que sólo le da a su hijo lo que le gusta: hamburguesa, sodas, fritos, dulces y helados. Puede hacerlo, pero moderadamente.