Hace tres años, el pueblo de Taiwán no podía imaginar que el Partido Democrático Progresista (PDP) fuera a gobernar el país, porque el todopoderoso Kuomintang (KMT) controlaba entonces firmemente la mayor parte de los recursos políticos y sociales. Sin embargo, en el mes de marzo de 2000, el candidato a la presidencia por el PDP, el Sr. Chen Shui-bian, derrotó a los otros cuatro candidatos convirtiéndose en presidente del país, y el cambio de partido gobernante se convirtió en una realidad. En mayo de 2000, la presidencia fue transferida pacíficamente del KMT al PDP, lo que representó un importante desarrollo de la democracia en Taiwán.
Hace dos años, cuando el KMT entregó el poder que había obtenido hacía medio siglo al PDP, también le transmitió muchos problemas y retos. Por ejemplo, el KMT todavía ocupaba más de la mitad de los escaños del Yuan Legislativo, y el PDP tuvo que hacer frente entonces a un antagonismo persistente en el Legislativo y en el sistema burocrático, que era todavía fiel al KMT. Además, la muy arraigada política de dinero que se había infiltrado en las instituciones financieras locales constituyó también un importante desafío para el PDP.
A pesar de estos problemas, el gobierno del PDP hizo un gran esfuerzo por poner en práctica diversas reformas para eliminar el "dinero" de las instituciones locales, de manera que Taiwán pudiera gozar de un sistema político más transparente. |