INQUIETUDES
Los despidos masivos
La Justicia Divina tarda pero llega
Antonio Dias
Es una provocación insensata los despidos masivos que se están haciendo en el Gobierno Nacional. "Jugar con la paila ajena" lo castiga Dios, tarde o temprano. De acuerdo a las estadísticas van 11 mil despidos y eso significa que un número plural de panameños van a pasar dificultades por el resto del año. El Gobierno Nacional no ha discriminado en la botadera, porque se han destituido de sus puestos de trabajo a empleados que tiene más de veinte años de servicio. Quizás eso le produzca una satisfacción momentánea al que tiene el látigo por el mango, pero ese funcionario indolente más temprano que tarde, las va a pagar. Allá arriba hay un Dios que todo lo ve, y que como gran nivelador sabrá ajustarles cuentas a los que tratan de sojuzgar a sus mismos compañeros. Existe una canción llamada "Tómbola" que dice, que todo lo que sube, baja. Este es un principio que debe tener en cuenta los que proceden de mala fe o con el clásico revanchismo. Nada hay más pecaminoso que la venganza y la acción de los amargados, pero esos no parecen darse cuenta que quienes así actúan animados por un sentimiento mezquino. 11 mil personas despedidas es una cifra significativa y presenta un panorama sombrío para las familias que no tendrán trabajo y tendrán una situación precaria en los próximos meses del año. El no tener qué comer ni poder hacer un supermercado cuando llega la quincena, es triste y doloroso. Ya los panameños parecen que no se acuerdan de los tiempos de la crisis, cuando mandaron a muchos empleados de vacaciones forzosas y cobraban una parte en especie y otra en metálico. Esos tiempos nadie quiere que vuelvan pero parece que los panameños sufrimos de amnesia histórica. Asimismo será la situación de los empleados públicos desempleados, cuya situación se les ha puesto negra, desde el momento en que lo declararon "insubsistente". ¿Se habrán puesto a pensar cuál será la situación de estos destituidos cuando llegué el día del padre, las fiestas patrias, el día de la madre, navidad y año nuevo? Por supuesto que no habrá una bendición para esos hogares que le causaron la desgracia a una o varias familias panameñas sólo por motivos políticos. Quiero apelar al espíritu cristiano que supuestamente anima a nuestros gobernantes para que cesen ya, esos despidos masivos, ya que me han informado que hay cientos de ellos pendientes y que se ejecutarán en los próximos meses. "La candidata de los pobres" tiene que tomar conciencia de lo que estamos diciendo y atender esa prioridad que llena de intranquilidad a nuestro pueblo. Una comunidad con estas tribulaciones no puede trabajar tranquila ni aumentar su productividad. Llama poderosamente la atención que mientras los gobernantes se dan golpes de pecho, la postura demagógica no se les desprende, lo que pareciera parodiar con aquello de que: "a Dios rogando y con el mazo dando". Creemos que es el momento de detener estas acciones masivas en todos los niveles porque la justicia divina cae tarde o temprano.
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