La búsqueda de financiación para lograr un mundo a la medida de los niños no es fácil, pero cuando se consigue, las inversiones en la infancia producen "desarrollo", según la opinión de políticos de América Latina, Africa y Europa que participaron en la sesión especial de la ONU sobre la infancia.
Empero, la reunión estuvo marcada por las diversas posturas frente al tema de los niños, en especial la posición estadounidense en contra del aborto y a favor de la abstinencia sexual.
La conferencia de tres días estuvo llena de retórica pública sobre la santidad de la infancia pero escasa en consenso, después de que el secretario de Salud de Estados Unidos, Tommy Thompson, presentó una posición conservadora en cuestiones de sexualidad.
"Como el presidente (George W.) Bush ha dicho, la abstinencia es la única forma segura de evitar las enfermedades de transmisión sexual, embarazos precoces y las dificultades sociales y personales que acompañan la actividad sexual no marital", dijo Thompson en la sesión inaugural.
El equipo de Washington se alineó con el Vaticano y países islámicos para retrasar un documento final de la conferencia por oponerse a la mención de servicios de planificación familiar que los críticos dicen implica el aborto.
La católica región de América Latina se opuso a este grupo junto con los europeos, entre ellos Polonia, y la mayoría de los países africanos.
Los conservadores estadounidenses también se oponen a un tratado de la ONU sobre derechos de los niños que casi todos los países han ratificado -- Estados Unidos y Somalia son los únicos que se niegan a ello -- porque creen que codificar estos derechos choca con los derechos de los padres. |