Fran Benedicto, un supuesto ex manager de Paulina Rubio, decidió descargar toda su artillería contra la Chica Dorada. En entrevista con la cadena española Telecinco, aseguró que Rubio sólo mantuvo su romance con el arquitecto español, Ricardo Bofill, “por conveniencia”, ya que por este medio ella recibía publicidad, y que por su culpa el arquitecto terminó adicto a las drogas.