Supuestamente la tocada del glúteo de un detenido terminó en filo y sangre.
El suceso tuvo lugar en horas de la mañana de ayer, jueves, en el Centro Penitenciario La Joyita.
Según fuentes extraoficiales, el privado de libertad Moisés Pedroza, de 21 años, le tocó "el trasero" a otro detenido, aparentemente en broma, y su agresor se molestó y le propinó dos puñaladas.
Una de las heridas fue en el costado derecho y la otra en el lado izquierdo de la barbilla.
Pedroza fue trasladado a la Sala de Urgencias del Hospital Santo Tomás donde se encuentra estable.