El zapallo, hasta inicios de la década del 90, era cultivado para satisfacer el mercado local. En su establecimiento no se aplicaban tecnología como el uso de variedades mejoradas, programas de fertilización, manejo agronómico, controles oportunos de plagas y enfermedades, entre otras.
Este cultivo adquiere importancia con el incremento de la demanda por parte de la población latina residentes en los Estados Unidos.
Esta situación, aunada a que su siembra en época lluviosa, permitió a los productores tener una alternativa comercial que le dejara ingresos durante este períodod e tiempo, en que otros cultivos como el melón y sandía no podían sembrarse. Además, de presentar cierta tolerancia a plagas y enfermedades.
Las primeras exportaciones de zapallo hacia los EE.UU se realizaron en el ciclo agrícola 1994-1995.
Para el ciclo 1999-2000, se lograron sembrar 900 hectáreas y exportarse 13.1 millones de libras en 277 contenedores. En la actividad participaron 296 productores (GANTRAP).
Los principales problemas del cultivo reportados son el bajo nivel tecnológico practicado por los productores en su establecimiento.
Entre éstas estaban: la mala preparación del suelo, uso de cultivares criollos de baja producción, uso de semilla mezclada de baja calidad, diferentes densidades de siembra y diferentes programas de fertilización, entre otros.