Las tres principales centrales sindicales panameñas marcharon divididas en la conmemoración del Día Internacional del Trabajo, pero coincidieron en demandar "medidas urgentes" para contener el alza al coste de la vida y un aumento general de salarios.
La plataforma de izquierdas FRENADESO (Frente Nacional de Defensa de los Derechos Económicos y Sociales) encabezó una marcha pacífica de protesta que recorrió -igual que las otras centrales- la Avenida Central desde el Parque Porras hasta la Plaza 5 de Mayo, frente a la Asamblea Nacional, que permanece cerrada por ser día de asueto.
Los obreros recordaron a los tres trabajadores de la construcción civil muertos este año a manos de la policía y miembros de otros sindicatos "amarillos" en enfrentamientos callejeros y denunciaron la "persecución" de que son objeto sus dirigentes.
Además, denunciaron la "venta y traición" de la "seudodirigencia" del Consejo Nacional de Trabajadores Organizados (CONATO), la central considerada afín al gobierno, porque "insiste en sacrificar las conquistas de los trabajadores para continuar logrando nuevas prebendas y canonjías".
También la Unidad de Lucha Integral del Pueblo (ULIP), otra plataforma de grupos políticos, estudiantiles, educadores, jubilados y obreros marchó denunciando la "política neoliberal promovida por el gobierno" y clamando por un aumento general del 100 por ciento, según unas cuartillas distribuidas entre los concurrentes.