Un nuevo estudio realizado en Gran Bretaña mostró que las discusiones entre madres e hijas pueden ser positivas para la relación entre ambas.
Investigadores hallaron en su estudio que las adolescentes acostumbran a usar estas discusiones como un medio de comunicación.
El estudio encontró que las madres y sus hijas adolescentes tienen discusiones de 15 minutos cada dos días y medio. Los adolescentes varones discuten con sus madres cada cuatro días y las discusiones sólo duran unos 6 minutos.