El gobierno estadounidense anunció que no obligará a los países europeos a apostar agentes armados en vuelos transatlánticos si los europeos no lo desean.
Asa Hutchinson, subsecretario estadounidense de fronteras y seguridad en el transporte, dijo a funcionarios de la Unión Europea que, si se determina que un vuelo está bajo amenaza, Washington considerará otras medidas, y que cancelará el vuelo sólo como último recurso.
Portugal, Suecia y Dinamarca han advertido que si surgen sospechas sobre un vuelo específico, prefieren cancelarlo a colocar guardias armados.