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¿Elián lloró o no lloró?, todos se preguntan
Agencias
Internacionales
Momentos después de que agentes federales irrumpieron el sábado en la casa de su tío exiliado, el niño cubano Elián González fue sacado en brazos de un agente que lo tranquilizó en español. La agente, entrenada para intervenir en casos de rehenes secuestrados, le dijo al niño de seis años que no se asustara porque no le pasaría nada, según informó el Servicio de Inmigración y Naturalización (SIN). Mientras agentes armados retenían a los familiares en otra habitación, la mujer agente le dijo en español que lo llevaría al lado de su padre y no a Cuba en un barco, dado el trauma sufrido por Elián cuando perdió su madre en un naufragio. La comisionada del SIN, Doris Meissner, dijo que la agente fue entrenada para comunicarle al pequeño que estaba con personas que lo cuidarían y lo llevarían a su "papá" quien lo esperaba en Washington. Las autoridades dijeron que la operación, en la que ocho agentes entraron en la casa, se completó en tres minutos, sin causar heridos. Pero en Miami, los parientes exiliados que quieren impedir el regreso del niño a Cuba, contaron una versión muy distinta. Afirmaron que los agentes entraron apuntando armas contra ellos y tomaron a la fuerza al niño, que habían sido escondido en un clóset por el pescador que lo rescató del mar en noviembre. "Son unos animales", dijo Marisleysis González, la prima de 21 años del niño, quien sostuvo que los agentes entraron en la casa gritando que dispararían si no entregaban a Elián. La prima dijo que el niño lloraba y gritaba pidiendo ayuda para no se lo llevaran. Meissner negó que Elián hubiera llorado y dijo que el niño reaccionó con calma, la misma calma con que ha enfrentado su vida desde la tragedia a la que sobrevivió en el Estrecho de Florida, en la que su madre murió ahogada. Antes de ser llevado a Washington, Elián fue revisado por un médico para asegurar que no estaba herido. Luego subió aun pequeño avión con la agente y un psiquiatra, quienes le dieron juguetes y plastilina para entretenerlo en el vuelo. Poco después de subir al avión, Elián habló con su padre por teléfono. Unas horas después, padre e hijo se encontraron en la base aérea de Andrews en las afueras de Washington, donde permanecerán unos días. Imágenes de televisión mostraron a Juan Miguel González entrando a una casa con Elián en sus brazos. El abogado del padre, Gregory Craig, dijo que Elián sonreía y abrazaba a su padre, quien mostraba un cara de gran alivio al verse reunido con su hijo por primera vez en más de cinco años. Craig dijo que Elián jugaba con su pequeño medio hermano de seis meses. Elián no puede salir de Estados Unidos mientras una corte federal decide una apelación de los parientes de Miami, quienes intentan lograr asilo político para Elián, solicitud que fue rechazada por la INS. El gobierno estadounidense decidió que sólo el padre puede hablar por su hijo. Elián y su padre se quedarán en un "retiro" cerca de Washington mientras dure el proceso judicial. No se sabe si se quedarán en la base aérea o en otra localidad. "Demos a Elián y a su padre el espacio, la calma y el apoyo moral que necesitan para reconectar y reafirmar el lazo entre padre e hijo", dijo la procuradora general de Justicia, Janet Reno, quien tomó la decisión de enviar los agentes a buscar a Elián.
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