Ejército frustra estallido coche-bomba en pueblo cerca de Bogotá

Agencias
Internacionales
El Ejército colombiano desactivó ayer un plan terrorista de la guerrilla de las FARC para hacer estallar un coche-bomba en el municipio de La Calera, pueblo vecino a Bogotá, informaron fuentes castrenses. El general Arcesio Barrero, comandante de la XIII Brigada del Ejército, precisó que ese plan rebelde fue frustrado "gracias a labores de inteligencia y a informaciones de la ciudadanía". Esa información permitió contrarrestar las acciones terroristas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en La Calera, dijo el general Barrero. El jefe militar instó a crear "un frente común" contra los planes de los rebeldes y anunció recompensas en dinero para quienes los denuncien e impidan así actos terroristas. En las últimas dos semanas han estallado coches-bombas en las localidades de Girardot y Cachipay, ambas en el departamento central de Cundinamarca y cercanas a Bogotá. La guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) amenazó con perpetrar matanzas en pueblos del Magdalena Medio, centro y centro-norte del país, según el Ejército que divulgó ayer una comunicación entre dos presuntos rebeldes de esa organización armada. Esas matanzas serían una manera de vengar los asesinatos colectivos cometidos por las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), la principal organización paramilitar del país. Los mandos militares atribuyeron a las AUC la muerte de más de 25 personas en Tibú, un pueblo del nordeste del país, cometida el jueves. Según la Agencia de Noticias del Ejército, una comunicación interceptada a dos cabecillas guerrilleros "habla de minar algunas localidades ribereñas en el sur de Bolívar, Santander, Antioquia, Caldas, Boyacá y Norte de Cundinamarca". Esa agencia transcribió algunas partes del diálogo entre los dos jefes guerrilleros, quienes se comunicaron por rdio, al parecer en algún lugar del departamento de Santander. "Va a tocar comenzar a meterle explosivos a todos esos barrancos...", dice uno de los rebeldes, mientras el segundo responde que "...le están metiendo candela y matándonos gente en esos pueblitos que no tienen nada que ver..." Más adelante el mismo rebelde precisa que "...hagamos algo y peguémosle una matada siquiera de unas 50 personas de esos lados, a ver cómo van a reaccionar, hermano, porque qué más hacemos..."
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