|
Peruanos decidirán entre deseo de cambio y temor a lo desconocido en elecciones
Agencias
Internacionales
Mañana domingo, día de los comicios presidenciales, los peruanos se debatirán entre el deseo de cambio, representado por el economista Alejandro Toledo, y el temor a lo desconocido, representado por el presidente Alberto Fujimori, quien busca prolongar sus 10 años de gestión. A favor de Fujimori se cuentan su éxito en derrotar a los grupos subversivos y una hiperinflación anual de más de 7.000% que soportaba el país cuando asumió en 1990. En su contra, pesan como fantasmas la pobreza que alcanza a casi la mitad de la población y el desempleo. Para muchos peruanos, el factor decisivo para definir su voto entre Fujimori y Toledo --quienes pasarán a una segunda vuelta, según los pronósticos de encuestadoras-- probablemente sea la necesidad de trabajo, la principal de las demandas en este país, donde el desempleo según las estadísticas oficiales llega a un 8% y que Fujimori no ha podido resolver. "Desde 1990 me dicen que mi gobierno es tal por cual, pero es eficiente para resolver los problemas nacionales", afirmó Fujimori antenoche en Lima en un mitin de cierre de su campaña electoral. No piensan así quienes como Marco Ruiz perdieron su empleo y tuvieron que recurrir al oficio de taxista para mantener su familia. Ruiz forma parte de la masa de nuevos taxistas, desde que hace dos años perdió su empleo como técnico en una compañía ensambladora de camiones. "Los primeros 5 años, Fujimori estuvo muy bien.Yo estaba contento, me gustó su trabajo. Pero en estos últimos 5 años lo único que se ha dedicado a hacer es a meter productos asiáticos, japoneses, taiwaneses y chinos, y a matar la industria nacional", dijo Ruiz a la AP. "Eso es lo que ha generado un desempleo total", agregó. No obstante, las cifras macroeconómicas obtenidas durante el gobierno de Fujimori fueron alentadoras: la inflación bajó a un dígito, mientras se registró un crecimiento económico sostenido, interrumpido por el fenómeno de El Niño y la crisis asiática y rusa en 1998.Las reservas internacionales ascienden a aproximadamente 9.000 millones de dólares. Fujimori reinsertó a Perú en la comunidad financiera internacional, después que su predecesor Alan García, le llevó a un aislamiento al negar el pago de la deuda externa. Promovió una política liberal de mercado, fomentó la inversión extranjera y la privatización de empresas públicas, que condujeron a una modernización del país. Sin embargo, ese aparente bienestar no se reflejó en los bolsillos de todos los peruanos. Los críticos del gobierno le acusan de haber priorizado sus compromisos internacionales con el Fondo Monetario Internacional y dejar de lado una economía social de mercado. Ruiz reflexiona, "por un lado, Fujimori dio la mano a los empresarios, quitando beneficios (laborales) a los trabajadores", y por otro, creó un implacable sistema de recaudación de impuestos, que puso en problemas a las empresas que trataban de sobrevivir a la aguda recesión. "Yo pienso que la gente estaría contenta si es que el señor (Fujimori) no hubiera chocado con la clase trabajadora", indicó. Conocedores de ese sentir, los candidatos presidenciales de la oposición han sabido dirigir sus promesas electorales hacia el tema del empleo. El lema de Toledo, es "Toledo-Trabajo", y el economista ha ofrecido crear 400.000 puestos de empleo. Pero, Fujimori critica los ofrecimientos de su rival, al decir que generaría un déficit al país superior a 4.000 millones de soles, unos 1.143 millones de dólares. El mandatario ha pedido a los peruanos no votar por quienes pretenden "experimentar" con el país y apela a su temor por un posible retorno a épocas ya superadas. "Nunca mas debemos regresar al pasado, a ese pasado del despilfarro donde se llevaban el dinero del pueblo", dijo Fujimori. El gobernante, que afirma ser la mejor opción para el desarrollo y crecimiento del país, llama "oportunistas" a sus adversarios porque dice que quieren acceder al poder "ahora que la mesa está servida".
|
