Estaba en la premiación de los mejores peloteros del torneo mayor y fue como un acto sin sentido, en la noche del domingo. Un simple trofeo que a muchos no agradó.
Otros lo disfrutaron como nunca antes... y en especial el intermedista Víctor "Porritín" Almengor (20 años) que viene de una lesión y para él todo en la campaña del 2004 fue ganancia. Víctor Almengor sacudió tres jonrones ante China, Taipei, en el mundial juvenil del 2002... fueron tres "mameyazos bien da´os compa". El pelotero entraba a la historia nacional e internacional, pero un año después perdería de jugar por una lesión en una rodilla.
"Pineda, fue mi culpa, me puse a jugar fútbol y no me cuidé", me dijo el "Porritín" en aquel momento. Una vez conversamos, pensé en Roberto Arango... el "Bob", en ese momento era director general del Instituto Nacional de Deportes (INDE).
Sin pensarlo dos veces llamé al "Bob" y junto a una comitiva de periodistas nos atendieron en las oficinas del INDE. El único objetivo era conseguir los fondos, para intervenir a "Porritín" Almengor y dejarlo en plena forma para seguir jugando béisbol.
Arango que hoy corre para Legislador por el circuito 8-9, dijo que ayudaría a "Porritín", y que no había motivos para darle la espalda a un atleta del futuro con mucho potencial.
Vino la operación en una clínica privada y un año después, Almengor se levanta con el premio al Mejor Segunda Base del Torneo Mayor.
Nada de esto hubiera sido posible, si no encuentra el apoyo en el momento indicado. Almengor salvó su carrera gracias al apoyo del "Bob" y su gestión al frente del INDE.
"Pineda, quiero darte las gracias... a ti, a los demás periodistas y en especial a Roberto Arango, de verdad me ayudó mucho y le debo mi regreso al béisbol. Personas como esa son las que aportan a la Patria, le agradezco todo lo que hizo conmigo y estoy seguro que recibirá el respaldo debido en el circuito 8-9, donde trabaja fuerte", explicó el "Porrita".
Lo cierto es que de los aplausos no se vive, ahora el mismo pelotero que recorrió los senderos con tres jonrones en un Mundial Juvenil, está de vuelta para revivir sus hazañas.
¡Viva el béisbol!
